No pudo tener mejor final de año el segunda base Dustin Pedroia después de conocer que su equipo de los Medias Rojas de Boston le dieron una extensión de contrato por seis temporadas y 40,5 millones de dólares.
Pedroia, ganador del premio de Jugador Más Valioso de la Liga Americana la pasada temporada, seguirá en la plantilla de los Medias Rojas hasta la temporada del 2014 y podría estar un año más si el equipo se queda con la opción para la campaña del 2015.
La pasada temporada, el segunda base estelar de los Medias Rojas jugó 157 partidos para dejar una producción de 17 jonrones con 118 carreras anotadas y 83 impulsadas después de alcanzar .326 de promedio de bateo.
A pesar de su poca altura, a penas llega al metro 75 centímetros, Pedrois se ha convertido en el segunda base más consistente que hay actualmente en las Grandes Ligas como lo demostró la cantidad de trofeos individuales que consiguió al concluir la temporada regular.
Al margen del premio MVP, Pedroia también recibió el Guante de Oro por su trabajo en el apartado del fildeo y el Bate de Plata por la efectividad en el ataque.
Pedroia también fue nombrado Novato del año la temporada del 2007 cuando su equipo de los Medias Rojas consiguió el título de la Serie Mundial.
"Tuve que pasar por muchas cosas para probarle a la gente que estaba equivocada, y hasta ahora lo he logrado," dijo Pedroia, de 25 años en una conferencia telefónica desde su hogar en Arizona luego de ganar el JMV. "Tuve que encontrar una manera de lograrlo".
El segunda base de los Medias Rojas admitió que la mayor satisfacción era haber conseguido en el campo de juego ser útil al equipo y no defraudar a las personas que si confiaron en su potencial.
Pedroia lideró la Liga Americana en imparables, carreras anotadas y dobles, y ayudó a los Medias Rojas a ganar el comodín de la Liga Americana, aunque luego no pudieron superar la Serie de Campeonato al quedar eliminados 3-4 ante los Rays de Tampa Bay.
Además de su rendimiento en el campo, Pedroia se convirtió en un favorito de los fanáticos en el Fenway Park con su manera rudimentaria de jugar, pero ganadora y consistente.
En una alineación diezmada por las lesiones del dominicano David Ortiz, el puertorriqueño Mike Lowell y J.D. Drew y el cambio a mitad de temporada del quisqueyano Manny Ramírez, Pedroia se cargó sobre sus hombros la responsabilidad de batear como segundo o primero para limpiar las bases.
Pedroia se convierto en el primer segunda base que ganó el premio de MVP desde que lo consiguió Nellie Fox, en la temporada de 1959 cuando jugaba con los Medias Blancas de Chicago.
Ninguna otra posición defensiva ha producido menos cantidad de premios de MVP, con sólo 10 peloteros ganadores desde que en 1931 fueron presentados los primeros galardones.
Pedroia fue el cuarto segunda base en ganar el premio de MVP de la Liga Americana, junto con Fox, Joe Gordon (1942) y Charlie Gehringer (1937).
Seis intermedistas han ganado el honor en la Liga Nacional, el más reciente fue Jeff Kent, Ryne Sandberg y Joe Morgan.
"Todo lo que me ha sucedido en la pasada temporada ha sido muy importante para mi, pero ahora tengo también mayor responsabilidad de cara al futuro para seguir haciendo bien las cosas", destacó Pedroia.
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